Cuanta más información poseas sobre cómo son los rasgos de la personalidad narcisista, mejor sabrás donde te estás metiendo
Un rasgo muy importante en una relación de amistad o pareja, es sin duda; el respeto y la comunicación. El problema de las relaciones personales es sobre todo, cuando te topas con personas que tienen un sentido desmesurado sobre sí mismos y una profunda necesidad de atención excesiva para quedar siempre por encima de quién sea y ahí es cuando nacen los conflictos.
Vamos a diferenciar dos conceptos:
- La personalidad narcisista es aquella persona que utiliza a los demás para satisfacer sus deseos y no aplica empatía en sus relaciones, se cree único y busca ser recompensado constantemente. El mito de Narciso, habla de un varón que se ahogó al intentar besar su propia imagen reflejada en el agua.
- El narcisismo patológico o Trastorno Narcisista de la Personalidad, afecta atan solo el 1% de la población, y sucede cuando esos rasgos de personalidad impiden llevar una vida normal a una persona, tiene muchos conflictos en sus relaciones interpersonales debido a su frialdad afectiva y quiere ser el centro de atención constantemente.
Sabido esto, entiende que existen personas “narcisistas” y personas con un “trastorno narcisista”. Las primeras si pueden cambiar su conducta con terapia y las segundas …
Los 3 Subtipos y cómo son en las relaciones de pareja
A los narcisistas les cuesta mantener relaciones estables amorosas. Pudiera ser que tu pareja sea un narcisista y no te des ni cuenta, porque has normalizado su comportamiento. Nadie de repente se convierte en “narcisista” ya que ha sido así toda su vida, pero al principio de la relación suele mostrar lo que le interesa para atraparte en sus redes.
Cuando aparecen las crisis o típicos problemas de la vida que pueden amenazar lo que desea el narcisista, para hacer frente a ese desafío, es cuando muestra toda su artillería manipuladora y le ves mejor “el plumero”.
Existen 3 subtipos que pueden identificar a nivel de relaciones de pareja y son los siguientes:
- Exhibicionistas/Encubiertos
Son esas parejas a las que les gusta ser el centro de atención. Tienden a dominar las conversaciones, disfrutan contando historias y dando consejos. Cuando se sienten inseguros, empiezan a “machacarte” infravalorándote. Se creen especiales y que siempre tienen la razón. Están «por encima» de todo el mundo. Se enfadan rápidamente y carecen de empatía emocional. Pueden burlarse cruelmente de alguien y ser totalmente ajeno a sus reacciones.
Devaluarán a otras personas cuando no puedan obtener la admiración que desean, o cuando se sientan criticados. Si deseas detectar este rasgo en alguien, ¡llévalo al límite y observa su reacción!
- Parásitos
Quieren ser «especiales», pero están en conflicto y no saben cómo destacar. Generalmente han sido criados por un padre narcisista exhibicionista que los humilló cruelmente siempre, provocando que su egocentrismo fuera tapado. Temen que otras personas vean sus defectos y los ataquen como hizo su papá con ellos. Se sienten especiales cuando presumen de lo que consiguen sus parejas pero como si ellos fueran los precursores de ese éxito.
Tienen tendencia a devaluarse a sí mismos, por lo que son los que siempre acaban pidiendo disculpas, pero con condiciones. Si critican a alguien será a sus espaldas, no tienen agallas de dar la cara para reprender públicamente a nadie.
- Tóxicos/malignos
Quieren dominar y someter a sus parejas, poseen una ligera tendencia sádica y disfrutan lastimando a otras personas. Están enfadados llenos de ira por no conseguir sus sueños, que suelen ser bastante imposibles de alcanzar, envidian al que tiene lo que quiere y se divierten “jorobando” a otras personas. Nunca te darán un cumplido y todo te lo van a criticar.
Les encanta ver a los demás sentir vergüenza. Quieren ser temidos, para sentir lo que ellos interpretan como “tener el poder en la relación”.
Detecta a un narciso en 5 minutos
Una personalidad de este tipo intentará controlarte desde el primer momento, porque en realidad busca que tú lo admires y lo atiendas en todo. Los cambios de ánimo son muy típicos de un narcisista ya que así pone a prueba si su pareja está dispuesta a ajustarse a él, sin tener que criticarlo.
Por naturaleza, los narcisistas atraen a gente empática porque así se asegura de que puede comportarse como le viene bien. No te harán ni una sola pregunta sobre ti o tus necesidades, solo desean que tú tengas muy claro lo que él quiere y necesita. Buscan una pareja que “sea su mamá o papá” y que los rescate.
Ser consciente sobre las señales del narcisismo en las primeras etapas de una relación es absolutamente imprescindible porque podría prevenir el desarrollar relaciones destructivas. Si no te han quedado muy claro las señales que te he mostrado anteriormente, pregúntale a una persona lo siguiente: «¿Eres narcisista?» o “qué opinas de los narcisistas?”. Y a ver que te responde, ya que si no estuviera afectado por esta patología lo definiría como algo negativo y su contestación sería crítica y de rechazo, un narcisista no tendrá reparo en reconocer parte de su arrogancia.
¿Cómo manejar a un narcisista?
Estas personas pueden tener dos tendencias: una sería la de rodearse de personas más vulnerables para que dependan de ellos y así asegurarse que alguien les va a cuidar o reunirse con gente que piensa como ellos, aunque esto evidentemente suele acabar mal por el conflicto que surgirá con “la lucha de egos”.
Tener una relación con un narcisista puede convertirse en una misión imposible, ya que te sentirás manipulado constantemente y explotado afectivamente, cuanto más tiempo pases a su lado, tu autoestima se evaporará y tendrás que cambiar tú para adaptarte a esa persona.
Una de las mejores soluciones es aprender a poner límites y distanciarse lo más posible de este tipo de personas, solo puedes controlar cómo puedes comportarte y responderle tú pero no puedes modificar como tiene que comportarse él.
Un narcisista necesita conflicto y desequilibrio para que existir, si le ofreces ambas cosas estarás perpetuamente pegado a él, si le ofreces aburrimiento y serenidad en tus actos, se alejará y te dejará en paz, ¡tú decides!
Artículo escrito 9 abril 2022 para El Progreso de Lugo y Diarío de Pontevedra